REZAR EL ROSARIO
Ver un ROSARIO por casa, en algún cajón, hoy, es buscar una aguja en un pajar.
Para Támara Falcó Preysler es más fácil, lo reza, en público y en privado.
Si no lo rezas y no lo has rezado nunca es una experiencia de la que no puedes hablar y tus "a mi me parece" o "yo creo que", que solemos utilizar para opinar de todo, no son más que palabras desconectadas de la realidad y fruto de una mente que cree que lo sabe todo.
➡️Se puede rezar con la mente. Sólo con ella es un juego de atención plena y escucha activa de uno mismo.
➡️Se puede rezar con el corazón y la mente. Experiencia en la que surgen sentimientos.
➡️Se puede contemplar el rosario: Rezo holístico con el que se consigue una transmutación de la realidad presente para alcanzar una íntima unión en el ahora. Lo que llaman una experiencia mística.
Se han estudiado científicamente los efectos de rezar el ROSARIO, son evidencias científicas de la eficacia de las estructuras mantra de alguno de los pensamientos que solemos tener de manera automática.
Si te observas bien en algunos momentos puedes llegar a repetir palabras y frases machaconamente. Esas repeticiones generan cambios en la energía y como consecuencia cambios de ánimo.
Los mantras son muy utilizados en el Budismo.
Los que rezamos el Rosario tenemos la experiencia de verificar sus beneficios y su uso diario supone una de las mejores medicinas.
Mi fórmula es sencilla, cuando me veas por la calle sólo caminando es muy probable que vaya rezar el Rosario.
Ahora, dotar al Rosario del significado que los católicos le damos requiere una disposición que sólo se genera con una razón muy sobrenatural, es decir, a parte de que por que me da la gana, requiere un conocimiento previo, una razón, una mente, dotada de los conocimientos precisos, lo que llaman ahora educación espiritual, inteligencia espiritual y religiosa, parecida a la que tenían San Agustín, Santo Tomás, Santa Teresa o Santa Catalina, y que todo buen católico tiene, aunque luego le cueste expresarlo con palabras o argumentarlo con la pericia que lo hacían ellos.
Esa mente dotada de una razón específica y que los científicos admiran cuando estudian y observan a quienes la poseen sumada a una voluntad de rezar el Rosario es la que abre las puertas del mismo Cielo, como dirían nuetr@s abuel@s.
El desprecio a esa razón y mente religiosa por parte de la sociedad moderna es general y evidente. Optó por otro camino la sociedad, no precisa del pasado y menos de Dios, se sirve de sí misma y su bondad para seguir en la vida.
Por eso rezar el Rosario es de pocos. Unos cuantos que intentamos fusionar el pasado y el presente para cambiar el futuro, lo que sólo se puede hacer con una Mente Cuántica, como la llaman ahora, pero de eso hablaremos otro día.
Pero sí, puedes cambiar el futuro, al igual que el pasado, y, sencillamente por una razón de su propia naturaleza: Son constructos mentales, no existen mas que en la mente.
Y no, no sé si Tamara Falcó tiene una Mente Cuántica, pero es posible que en alguna ocasión la haya experimentado, como tú misma, sin darte cuenta de ello, pues todos podemos desarrollarla.
#soyunodeellos