REINCI@TE: Los MAESTROS de la FIDELIDAD: El perro.

Navegando por internet se encuentran pensamientos, reflexiones y sentimientos. Esta mañana encontré una reflexión que me hizo cambiar el rumbo de las mias para este Blog. Yo tengo a Capitán, antes tuve a Brutus (el de la foto), Richard y Chicarrón sin olvidar al de Julia, Zarco. Todos ellos perros, todos ellos Maestros de Sabiduría pues nos vienen a enseñar, lo que es la FIDELIDAD. Lo hacen repitiendo constantemente las mismas rutinas, hábitos y costumbres y que podemos resumir de la siguiente manera: 1º.-Cuando tus seres queridos lleguen a casa siempre corre a saludarlos. 2º.-Nunca dejes una oportunidad de ir a pasear y deja que el viento golpee tu cara y siente el éxtasis que produce. 3º.-Toma siestas. Estírate antes de levantarte. 4º.-Corre, brinca, juega a diario 5º.-Mejora tu atención y deje que la gente te toque. 6º.-Evita morder cuando un simple gruñido sea suficiente 7º.-En días de calor recuéstate en la tierra patas arriba. Cuando tengas mucho calor hazlo bajo la sombra de un árbol. 8º.-Cuando seas feliz baila alrededor y mueve todo tu cuerpo. 9º.-Nunca pretendas ser algo que no eres. 10º.-Si lo que buscas está enterrado escarba hasta encontrarlo 11º.-Cuanto alguien tenga un mal día acompaña en silencio, cerca de él y hazle sentir que estás ahí. YO NO TENGO HOY NADA MAS QUE DECIR que GRACIAS. SIEMPRE ADELANTE “CAPITAN”. y a tí BRUTUS te repito lo que el 28 de marzo de 2011 escribí por ti y para ti: Tú que llegaste a mi vida por casualidad. Tú que rápidamente enraizaste en mi corazón. Tú que fuiste compañero de sonrisas y lágrimas. Tú que siempre estabas ahí. Guardián de mi hogar. Compañero de mis hijas. A ti hermoso espíritu que hoy vuelves a ser energía. A ti dedico hoy mi dolor y mis lágrimas. Nadie sabe como tú mis anhelos, mis esperanzas. Querido amigo de paseos nocturnos y vespertinos. Testigo del ahora, nuestro ahora. Hoy he salido a caminar pisando tus últimas huellas. Allí estaban todos, los pájaros, los árboles, el cielo, el sol, las nubes. Todos hasta el cocker del número 41 que ladraba hoy más que nunca. Y hoy, cuando acababa el paseo una cigüeña ha cruzado el cielo. He pensado, ahí, ahí va tu espíritu camino de un nuevo hogar. Que la nueva morada sea digna de tu alto y digno espíritu. ADIÓS, adiós mi querido y fiel amigo.

REINCI@TE: Creencias limitantes, nuestros METEORITOS.

Durante años estuvieron formándose en nuestro interior, conformándose a base de pensamientos subconscientes que con estructura “mantra”, repetidos y repetidos miles y millones de veces se han consolidado como creencias absolutas dignas de una fe ciega y cuando despertamos por un instante para tomar una acción necesaria se desprenden del subconsciente y como meteoritos impactan sobre nuestro consciente y nuestra intuición para destruirla. Bombardean nuestro Ser y la Intuición con tal virulencia que son totalmente destructivos de la esperanza, los sueños y la ilusión. Bienvenidos a las CREENCIAS LIMITANTES. Las “lluvias de meteoritos” o “lluvia de creencias limitantes” o el “meteorito o creencia limitante de extinción total” son muy frecuentes en nuestra vida, muchos de ellos se crearon en nuestra niñez. Nuestra mente es la responsable, que toma un evento real de nuestra vida asignándole significados e interpretaciones que nos limitan, nos quitan poder de acción. Es el típico “No eres los suficientemente bueno”. Eventos de nuestra vida concretos o vivencias repetidas en las que el pensamiento, asociado a una emoción contractiva ha provocado un sentimiento limitante que acaba conformando la creencia limitante, es decir, nos lo acabamos creyendo a pie juntillas. El objetivo es eliminarlas según aparezcan. La observación es fundamental, por ello el centro de observación y el seguimiento serán dos herramientas fundamentales. Los primeros impactos, que como meteoritos, las creencias limitantes provoquen, deben ser analizados en el laboratorio para verificar su composición y origen. En el caso de la creencia limitante, se hace necesario verificar en qué momento se formaron, que eventos las provocaron. Las creencias limitantes en el momento en que son detectadas, analizadas y cuestionadas pierden eficacia y desaparecen de nuestra vida. El trabajo de atraparlas da paso al trabajo de analizarlas en el que las “preguntas poderosas” serán una herramienta básica: Porque, para que, como, donde, cuando, quien, qué???. Busca en los eventos de tu niñez entre los 0 y los 6 años pues es cuando nuestra actividad cerebral e imaginación creativa están muy predispuestas para la formación de creencias pues es cuando nos educan para sociabilizarnos, nos dicen lo que está bien y lo que está mal, nos evalúan, nos califican de listos o torpes, rebeldes u obedientes…., en fin cada uno habrá tenido una infancia, en ella hay muchas respuestas para eliminar meteoritos (creencias limitantes). ¿Quieres convertir en un caza-meteoritos un caza creencias?

REINICI@TE: VALORES: Un diamante en bruto.

Siglos tardan los diamantes en crearse en lo más profundo de la naturaleza. Una vez extraídos hay que pulirlos para que den todo el brillo de que son capaces. Pero antes de brillar como una estrella deben permanecer en la más profunda oscuridad. Así también nuestros VALORES, permanecen anclados en nuestro interior desde la infancia donde comenzaron su proceso de cristalización hasta el momento en que brillan en la madurez de la vida con todo su potencial. Existen varios tipos de VALORES; valores como CRITERIOS de evaluación, como ESTÁNDAR de comportamiento personal y como PASIÓN o fuente de motivación personal. Son por tanto fuente de pensamientos, emociones y sentimientos. La Axiología es la rama de la filosofía que estudia los valores. Los valores pueden ser positivos o negativos. Objetivos o subjetivos. Fijos o dinámicos. Se pueden jerarquizar. Todo cambio en nuestra vida para pasar de un estado a otro más evolucionado requiere un fundamento en una serie de puntos clave y estos no son otros que los VALORES (axiología existencial) que se convierten en los fundamentos de la acción. Los VALORES se “internalizan” expresión de Stephen Cobey (“internalizar”) como proceso de transmisión, de educación, de entrega de una generación a otra y para ello es necesario el HABITO, que después será una COSTUMBRE y finalmente un CARÁCTER, será entonces cuando aparezca el VALOR como diamante en todo su esplendor. El proceso de “internalizar” comienza cuando somos niños y es responsabilidad de quienes nos crían y educan, si ellos hacen lo que dicen nuestra personalidad será más sólida que cuando ellos no practican lo que predican. Educamos por lo que somos no por lo que decimos. Los jóvenes aprenderán VALORES a través de la relación con otras personas, los profesores, líderes y modelos de valores. Transmiten mejor los valores quienes los encarnan, es decir quienes los poseen y a través de su actitud y conducta los ponen en práctica ante nuestros ojos. Por eso en VALORES es preferible el “Ven y verás” al “déjame que te cuente”.

REINICI@TE: “Rema mar adentro: Sin ansiedad”

Durante estas semanas de viaje hacia el interior en busca de la felicidad plena hemos atravesado el “País de las Sombras” en compañía del “serpha” que es el Ser y con la ayuda de las “palabras llave” hemos logrado extraer la sabiduría incausada que toda “sombra” tiene para el presente aunque se encuentra en el “baúl de los recuerdos” como representante del pasado. Es el momento de mirar hacia adelante y adentrarnos sin miedo “mar adentro”. Lo que tenemos delante es un inmenso mar al que no le vemos fin, del que no tenemos mapa y por el que nos disponemos a navegar. Lo primero que se nos ocurre es sencillamente no perder la costa de vista, navegar como lo hacían los antiguos marinos, con la costa a la vista para no perderse en un mar que era temido y del que algunos jamás volvían. Es el MIEDO nuestro compañero, miedo a lo desconocido, miedo a la oscuridad, a la inmensidad, a la fuerza que despliega, en fin, MIEDO. Navegar con miedo. Más debemos navegar mar adentro, debemos adentrarnos en este mar para alcanzar la felicidad plena, que es el objetivo de este viaje, para ello tendremos que gestionar una emoción contractiva como es el MIEDO. Todos hemos conocido el miedo, forma parte de nuestra vida, el MIEDO que sentimos en el mar interior lo denominamos ANSIEDAD, nos impide “remar mar adentro”. El Miedo, la Ansiedad son dos grandes maestros de vida. Tenemos dos opciones: o rendirnos y darnos la vuelta, o enfrentarnos a ellos mediante las herramientas y sabidurías adecuadas y ellos nos despejarán el camino y reforzarán nuestra confianza, nuestra autoestima.